El papa Francisco encabezó el sábado una oración especial para pedir el fin de la pandemia de COVID-19, rodeado de una muestra representativa de la gente que está en el frente de batalla contra el coronavirus.
Francisco celebró el encuentro el sábado por la tarde, que fue por mucho la reunión más grande en el Vaticano después de las medidas de confinamiento. La oración se realizó en los Jardines del Vaticano y a ella asistieron un médico, una enfermera, un capellán de hospital, un farmacéutico, un periodista y un funcionario de protección civil, entre más de 100 invitados.
También estuvieron para la oración, en una gruta artificial dedicada a la Virgen María, un enfermo recuperado de COVID-19, una persona con un pariente que murió durante la epidemia de Italia, y los padres de un bebé nacido durante la emergencia de salud.
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Oración mariana
En marzo, el Vaticano siguió el ejemplo de Italia de suspender la mayoría de sus actividades, incluyendo todo culto público. Muchos de los asistentes al encuentro del sábado portaban mascarillas, pero Francisco no.
La oración mariana se celebra cada fin de mayo, mes en el que la Iglesia católica rinde homenaje a María. Este año, el Vaticano dijo que la oración del rosario por parte del papa se realizó simultáneamente en más de 40 santuarios marianos en todo el mundo.
